".....como moribundos, más he aquí que vivimos" ( 2 Corintios 6:9).
La Biblia está llena de paradojas, es decir, verdades que parecen contrarias a lo que normalmente suponemos o que parecen contradecirse unas a otras. G. K. Chesterton sostenia que una paradoja es: "una verdad haciendo el pino para atraer la atención". A continuación presento unas cuantas paradojas que sin duda atraerán nuestra atención:
Cuando perdemos nuestra vida la salvamos; cuando la amamos, la perdemos (Marcos 8:35).
Somos fuertes cuando somos débiles (2 Corintios 12:10), e importantes en nuestra propia fuerza (Juan 15:5).
Encontramos la libertad perfecta cuando somos esclavos de Cristo y la esclavitud cuando estamos libres de Su yugo ( Romanos 6: 17-20).
Encontramos más gozo al compartir lo que tenemos que en tener más. O, en las palabras de nuestro Señor: "Más bienabenturado es dar que recibir
( Hechos 20:35).
Aumentamos lo que tenemos al repartirlo, y acabamos en la miseria cuando lo retenemos (Proverbios 112:24).
Tenemos una naturaleza nueva que no puede pecar (1 Juan 3:9), sin embargo, todo lo que hacemos está manchado por el pecado ( 1 Juan 1:8).
Conquistamos cuando nos rendimos ( Génesis 32:24-28) y experimentamos la derrota cuando convatimos( 1 Pedro 5:5c).
Somos humillados cuando nos exaltamos, pero cuando nos humillamos Dios nos exalta (Lucas 14:11).
Somos ensanchados en la angustia (Salmo 4:1) y rteducidos en la prosperidad (Jeremias 48:11).
Podemos poseer todas las cosas y sin embargo no tener nada; podemos ser pobres, y con todo hacer ricos a muchos ( 2 Corintios 6:10).
Cuando somos sabios (en el concepto del hombre) entonces somos necios (a vista de Dios), pero cuando somos necios por amor de Cristo, entonces llegamos a ser verdaderamente sabios ( 1 Corintios 1:20-21).
Cuando andamos por fe somos libres de preocupaciones e inquietudes; pero cuando andamos por vista nos asaltan el temor de la pérdida por la polilla, el moho y los ladrones (Mateo 6:19).
El poeta ve la vida cristiana como una paradaja de principio a fin:
Qué extraña es la ruta que a algunos toca transitar,
Qué enredada la senda por la que han de caminar;
La esperanza de su felicidad nace del temor,
Y su vida por la muerte la han de recibir
Sus más honradas pretensiones se ven aplazadas,
Y sus mejores resoluciones, contrariadas;
No puede esperar ser completamente liberado
Hasta que no se haya totalmente desahuciado.
Cuando todo esto ha ocurrido y su corazón es confirmado.
De la total remisión de su pecado;
Cuando su paz es procurada y su perdón está firmado.
A partir de ahí, su conflicto ha comenzado.
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