lunes, 27 de agosto de 2018

Devociones: "Uno hace diferencia entre día y día; otro.....".

"Uno hace diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. cada uno esté plenamente convencidos en su propia mente".
                                              (Romanos 14:5)

    La palabra "igual" debería suprimirse en este versículo; fue añadida por los traductores. Debería leerse: "otro juzga cada día", esto es, ve cada día como sagrado.
    Para los judíos que vivían bajo la ley, el sábado o séptimo día era especialmente sagrado. La ley prohibía trabajar en ese día y restringía también los viajes. Se requerían ofrendas adicionales.
    A los cristianos que viven bajo la gracia no se les manda guardar el día de reposo. Para ellos todos los días son sagrados, aun cuando creen que hay un principio en la Palabra de de un día de descanso por cada siete. No se les puede condenar por no guardar el sábado (Colosenses 2:16).
    El primer día de la semana, esto es, el día del Señor, se destaca en el Nuevo Testamento por varias razones. Ese día el Señor Jesús resucitó (Juan 20:1). Después de Su resurrección se encontró dos domingos sucesivos con sus discípulos (Juan 20:19, 26). El Espíritu Santo fue dado en Pentecostés el primer día; Pentecostés sobrevino siete domingos después de la fiesta de las primicias (Leviticos 23:15-16); (Hechos 2:1), que simboliza la resurrección de Cristo
 (1 Corintios 15:20, 23). Los discípulos se reunían para partir el pan el primer día de la semana (Hechos 20:7). Pablo dio instrucciones a los corintios para reunir una ofrenda especial el primer día de la semana (1 Corintios 16:1-2). Sin embargo, este no es un día de obligación especial como el sábado, sino un día de privilegio especial. Ya  que el domingo se nos descarga de la obligación de nuestro trabajo normal, podemos dedicarlo a la adoración y al servicio de nuestro Señor de una manera que no podemos dedicarlo los otros días.
    En tanto que estamos en libertad para entender que todos los días son igualmente sagrados, no tenemos libertad de hacer nada en domingo que pudiera hacer tropezar a otros. Si trabajar en la casa, reparar el automóvil o jugar a fútbol haría tropezar a un hermano, entonces debemos renunciar a lo que podríamos considerar un derecho legítimo. Como dijo Pablo: "Ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano" (Romanos 14:13).
     Los judíos bajo la ley tenían un día de descanso al final de una  semana de trabajo. Los cristianos bajo la gracia comienzan su semana con un día de descanso, porque Cristo ha terminado la obra de la redención.
     C. I. Scofield señalaba que el verdadero carácter del Dia del señor se ilustra por el modo en que  nuestro Señor lo utilizaba: "Confortó a Maria en su llanto; caminó siete millas con dos discípulos perplejos, dándoles una lectura bíblica por el camino; envió mensajes a otros discípulos; tuvo una  entrevista privada con el Pedro reincidente; e impartió el Espiritu Santo a los que estaban en el aposento alto".    

No hay comentarios:

Publicar un comentario