sábado, 6 de febrero de 2016

Devociones:"¿Qué hay que hacer? ".

Imposible totalmente es, en medio de un mundo tan grande y de tantas personas y circunstancias, prever que ocurrirá o que acontecerá; si supiéramos lo que fuera a pasar, a suceder, a ocurrir; si supiéramos los accidentes, los incidentes y todo aquello que pudiéramos evitar; nos prepararíamos para recibir todo eso, de una manera firme, dispuestos a enfrentarlo. Lo único en todo este inmenso mundo,y eso que no a ciencia cierta y con mucha margen de error, que podemos "producir" es la lluvia; cuando se forman las nubes, cuando el cielo está oscuro y todo se pone gris, decimos: "Va a llover", la pregunta es: ¿Por qué entonces no podemos predecir lo que va a ocurrir en nuestras vidas? ¿O ¿quizás podemos, pero no les prestamos atención?.
    Cuando está el cielo gris, nos abrigamos, no cubrimos muy bien para estar preparados por si llueve; cuando está haciendo mucho frío de igual manera nos abrigamos para no sentirlo y tratar de evitar al máximo que nuestro cuerpo se congele; cuando está haciendo mucho calor, nos ponemos ropa cómoda para que nuestra piel pueda tener una buena ventilación. Pero en medio de todo esto hay algo para lo que nos tenemos que cubrir mucho más, o descubrir según sea el caso, y es para nuestra vida cristiana.
     Ciertamente se hace un poco complicado prever lo que ocurrirá en nuestras vidas, pero tenemos a nuestra ayuda al mejor de los mejores. El Espíritu Santo, que seguro estoy que nos revelará el momento exacto en el cual tengamos que abrigarnos mucho o por el contrario estar mas cómodos.
     Nuestro espíritu que está siempre conectado al Espíritu santo, siente cuando algo está a punto de cambiar, cuando algo no está bien, cuando discernimos que algo va a pasar y el Espíritu Santo se encarga de confirmarlo; lo que sucede es que muchas veces no les prestamos atención a esas llamadas de emergencia, a esos avisos de cambio de clima, a esas advertencias; y no nos preparamos, y viene el huracán y arrtasa con toda nuestra vida cristiana, dejandola literalmente en el suelo sin ganas de más, ¿a quién no le ha pasado eso?....a todos nos ha pasado en algún momento, quizás ahora mismo, quizás ya paso, pero quizás está a punto de pasar.
     Cuando el huracán de la tristeza golpea es bastante duro y de verdad nuestro corazón se siente muy mal. 
    Pero aun así podríamos decír que muchos de estos eventos ¿los pudimos evitar? ¿Pudimos estar preaprados?.
    
                      ¿Si la vida te derrota que hay que hacer......?

                            NADAREMOS, NADAREMOS,
                              En el mar, el mar, el mar.

  "Dios es tardo para la ira y grande en poder, y no tendrá por inocente al culpable. Jehová marcha en la tempestad y el torbellino, y las nubes son el polvo de sus pies".
                                          (Nahúm 1:3)
   "Guarda mi alma, porque soy piadoso; Salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en tí confia"
                                         (Salmo 86:2)
                                       

     

No hay comentarios:

Publicar un comentario