sábado, 16 de julio de 2016

Devociones: "Yo en tí confío".

                        "En el día que temo, yo en tí confío"
                                                    (Salmo 56:3)

       En esta semana, después de mucho tiempo he sentido que el temor se ha apoderado de mi. Las vivencias cotidianas, mi lugar de trabajo y las opresiones se han convertido en un GIGANTE que se hace imposible de derribar.
     Me he sentido como David enfrentándome a Goliat, pienso en Él y puedo entenderlo, puedo ponerme en su lugar y hoy puedo sentir lo que Él ha sentido.
     Esa sensación de perder la libertad, de tener que escaparse, de sentirse como en una cueva, oscura, fría y sin saber que pasara cuando haya que salir de ese sitio. A que GIGANTE habrá que enfrentarse.
     Sin duda son momentos extremos los que he tenido que pasar, de temor, de incertidumbre, de sentirme un esclavo.
     Pero es aquí, justo en este punto límite, en donde recuerdo que soy hijo del Rey, que me coronó como principe, en donde esa cueva se transforma en un paraiso, en donde tengo presente quien soy para Él.
      Justo cuando he sentido que ya no me quedaban fuerzas, Él me ah visitado y con su armadura me ha proteguido, me ha abrazado fuertemente y me ha dicho: NO TEMAS, YO TE AYUDO.
    En este tiempo en el que el temor me había dominado, he sentido que mi Gigante no podía ser vencido, que era imposible de ser derribado,pero hoy puedo decir: "SEÑOR, EN EL TIEMPO QUE TEMO, YO EN TI CONFÍO", TU PALABRA HA SIDO MI SUSTENTO Y EN TUS PROMESAS HAYO MI DESCANSO.
     Sé que en Él está la fortaleza de los siglos, que Él hará mis pies como de siervo y me hará subir hasta la cima más alta y mi gigante se verá tan pequeño que ya no habrá mas temor y toda duda de poder será disipada.
     Seguramente en tu vida existen estos GIGANTES, jefes de trabajo, malos compañeros, deudas, soledad, desanimo, ¡UFFF!! ¡CUANTOS!.
    Pero, mira: sé que esto es necesario para ver como el, poder de Dios ira obrando en nuestras vidas, como con su poder hará caer aquellos árboles tan altos e imposibles para nosotros y los derrumbará, sé que este tiempo es necesario para ver su mano en todo momento y ¡darle toda la gloria solamente a Él! 

               Y si el con nosotros, ¿Quién contra nosotros?

    Te animo a no tener miedo , más allá de las circunstancias. Este gigante no es más grande que Dios. Te animo a levantar tu cabeza a salir con tus tres piedras y arrojarlas con todas tus fuerzas porque hoy derribarás, como DAVID aquel GIGANTE al que cada día te enfrentas y dirás:

                      En el día que temo, ¡Yo en Dios confío!  

No hay comentarios:

Publicar un comentario